miércoles, 18 de noviembre de 2009

Rostros del "Plan Puebla" Testimonios de Maíz.







Para los investigadores que dieron vida el Plan Puebla, entre ellos
Dr. Escobedo, Dr. Estrella, y a la gente del campo poblano.

El Colegio de Posgraduados Campus Puebla, dentro de sus festejos por el cincuenta aniversario de la institución, ha realizado una serie de eventos en donde investigadores, alumnos, administrativos y gente de las comunidades, está participando. El día de hoy mientras se realizaba uno de estos eventos capte los rostros de algunos de los asistentes, se trata de campesinos que desde hace años han visto sus vidas ligadas al colegio de posgraduados y a sus actividades. Testigos del Plan Puebla, -un programa exitoso que permitió aumentar la producción del maíz en zonas cercanas al campus-, estos hombres han vivido las glorias y el abandono del campo. Nacidos bajo la identidad campesina, su vida estuvo dedicada a producir los alimentos para el pueblo mexicano, en ello radica su trascendencia y su misión. Sin embargo, y luego de que las políticas dejaran de apoyar el agro, estos hombres se han convertido en representantes de lo arcaico, del retraso y de lo que se debe eliminar con miras al “progreso”.



Para Toledo, en la actualidad las comunidades campesinas e indígenas del tercer mundo son vistas como sectores arcaicos y primitivos, además de subdesarrollados. En ese sentido, y ligado a la simetría social, se ha negado a los campesinos e indígenas su carácter de sujetos sociales. La sobre explotación de los recursos naturales y la afección que se ha producido a las comunidades vinculadas al campo, se origina en varias creencias falsas: la tendencia a percibir como inferiores a los sujetos rurales, la creencia de que el cientificismo es la única propuesta viable para solucionar los problemas sociales o de seguridad alimentaria, la tendencia a considerar que la desaparición del campesinado es un requisito necesario para modernizar el agro.


La economía campesina es algo así como natural y abierta. La subsistencia del campesino depende de los intercambios ecológicos con la naturaleza, más que de los intercambios económicos. Se trata de una economía de subsistencia ligada casi completamente a la naturaleza. Se caracteriza por una producción diversificada; es una estrategia que permite maximizar la obtención de productos necesarios para la supervivencia familiar a lo largo del año. La producción campesina se complementa con algunos recursos que se obtienen del intercambio económico. Para entender el conocimiento producto de la experiencia de las comunidades, Villoro distingue entre ciencia y sabiduría, siendo la ciencia un saber justificado de forma objetiva y teóricamente expresado, y la sabiduría un conocimiento basado en la experiencia personal.


Los rostros de los campesinos que hoy escuchaban y recordaban las glorias pasadas y reconocen los obstáculos a los que se enfrentan, ante un país que desconoce su importante papel, están presentes en estas imágenes. El campo mexicano es como estos hombres, sincero, honesto y benévolo.Sus vidas son testimonios de la presencia del Maíz y su relación con la producción cultural de México.