lunes, 28 de febrero de 2011

Presentación del carnaval 2011


















Un carnaval es una celebración anual que se realiza antes de la cuaresma cristiana. En todo el mundo cristiano se realizan carnavales. La característica en común en estas fiestas es que se permite realizar actividades placenteras, permisivas, dentro de los límites de la tolerancia. El origen de los carnavales se encuentra en las fiestas paganas que se realizaban en honor al dios Baco (dios del vino), hace más de cuatro mil años en el pasado. Posteriormente, la celebración se extendió por Europa y desde el siglo XV se realizan carnavales en América.
El carnaval más grande del mundo se realiza en Rio de Janeiro en Brasil, otros famosos carnavales son el de Venecia (Italia), el de la Santa Cruz de Tenerife y el Carnaval de Cádiz (España). En México el carnaval más famoso es el de Veracruz.
La palabra carnaval deriba del latín que significa carne-levare o “abandono de la carne”, y se relaciona con el hecho de que durante la cuaresma se avandonara la carne; es decir, el carnaval es una fiesta de la carne, donde se permite a los participantes cometer pequeños excesos antes de que se inicien las festividades donde tendrán que controlarse, dejar de comer carne, dejar la música y el baile y otros placeres (durante la cuaresma). En todo el mundo los carnavales son fiestas en donde participa la gente del pueblo, se trata de una actividad lúdica cuya finalidad es divertirse.
En México los carnavales más famosos son el de Veracruz, Campeche, Mazaclan. Generalmente los carnavales incluyen desfiles, música, bailes y coreografías. El carnaval de Puebla se realiza en el primer barrio de la ciudad, el Barrio del Alto, y se caracteriza por la participación de personajes como el huehue, el diablo, la María. En este carnaval los participantes utilizan vistoso trajes, máscaras y sombreros adornados con plumas, y realizan complicadas coreografías en forma de danzas cortesanas.
Los carnavales son festividades que atraen al turismo y por tanto atraen divisas a las ciudades donde se realizan. Como bien sabemos, en Cholula cada año se realiza uno de los carnavales más originales en el mundo, se trata de un carnaval en el que los personajes simulan participar en batallas, armados con escopetas-mosquetones (se trata de un carnaval que deríba del Carnaval de Huejotzingo). Si bien los carnavaleros danzan, la principal actividad lúdica no es el baile; lo que más atrae al carnavalero es poder detonar cargas de pólvora con sus rifles. Para quienes por años hemos asistido a la festividad, observamos las muchas emociones que afloran entre los participantes; es un momento de unión en donde toda la familia acompaña a “el que va a salir”, al integrante de la familia que se viste con el traje de carnavalero. Es un momento lúdico, en el que los participantes se divierten. Se observa la transmisión de la tradición y la construcción de identidades en los niños que de la mano de sus padres realizan sus primeras participaciones en la festividad. Desde apenas comenzar a caminar, los niños son bellamente atuendados y su presencia resulta en uno de los espectáculos más hermosos dentro de la festividades.
El control puede perderse en cualquier momento, y la negación de parte de los carnavaleres a dejar el alcohol puede originar accidentes graves. Por otro lado, también los batallones se niegan a dejar la polvora; por lo que los elementos mascaras + alcohol + pólvora son el motivo de las polémicas. El control de uno de estos elementos disminuiría notablemente los riesgos. Con el poder que da el cargar un arma, con la sensación del anonimato que propician las mascaras, y con la exaltación generada por el alcohol, el carnaval requiere de un extricto control del gobierno y de los mismos líderes al interior de los llamados batallones (contingentes de danzantes-carnavaleros).
Juego, diversión, poder, adrenalina, construyen una de las festividades más controversiales, estéticas y originales en el país. A pesar de la polémica, los participantes defienden la continuidad de la festividad. Para ellos, esta festividad constituye un momento de gose y plenitud, para el que se han preparado a veces por años, y en el que han invertido cuantiosas sumas –un traje completo puede costar más de 20 mil pesos-. Los vistosos trajes son verdaderas obras de arte que valen la pena apreciarse y admirarse. El tipo de turismo que podría admirar esta festividad no es un turismo común, ni es atractiva para muchas familias con niños; más bien, se trata de una actividad solo atractiva para un turismo cultural más especializado. En realidad se trata de una fiesta para y al interior de la comunidad, cuyo significado más profundo es apreciado por personas como los ancianos, que siendo los iniciadores de la festividad también participan y gozan con ella. Toda expresión cultural tiene aspectos positivos y negativos, pero pocas pueden cultivar polémicas y belleza estética de forma tan extrema como el Carnaval de San Pedro Cholula.

Fotografía: Isabel Muñiz Montero