Mientras escucho una canción de Fernando Delgadillo (llovizna) , que mi mejor amigo me hizo favor de enviar y mientras recuerdo el fin de semana bajo las suaves brisas de las primeras lluvias que dan la bienvenida al verano, soy consciente de lo difícil que es aceptar el paso del tiempo, de los hechos, de las situaciones. No es fácil seguir el andar del tiempo, entre experiencias dolorosas y felices. Es tan efímero el momento presente, que bien vale la pena capturarlo en una imagen. Difícil es para mí a través de estas fotos, expresar los sentimientos, tal vez la nostalgia que despiertan los recuerdos se pueda observar a través de estas luces azules y doradas. Esta ciudad que es marco de tantas historias de tantos recuerdos tan personales, es también escenario de esta mi corta vida, de mis sentires y vivencias; tal vez esta ciudad es mi gran amor, pero ahora, y con la necesidad de encontrar el afecto y la calma que me dan los espacios abiertos , quiero compartir unas palabras , no mías, si no de la hermosa canción de delgadillo, y las imágenes que vieron mis ojos, en un instante de dicha que se perdió con la llovizna, pero que se quedo atrapado en una fotografía. Pues de un instante a otro las historias cambian.
Fernando Delgadillo
Llovizna
Allende el mar, que enjuaga las distantes costas donde tu solitaria barca ha de varar, ya vendrá el viento de olvido que amaina todos los dolores y aun así recordaras. A veces hay que pararse bajo la lluvia pero de todos es comenzar otra vez, consiste solo en continuar, lo dice un hombre que habita en donde nunca deja de llover. Arde la piel, y buscan todas tus caricias los encendidos arrebatos de su piel y las estrellas titilantes vieron frías la angosta estela de la barca en que se fue. A veces piensas que le olvidas y te animas algunas otras no lo puedes resistir, lo cierto es que el dolor te rodeo en sus espinas y tu tan solo no volviste a sonreír. Recordaras otras estrellas, otros cielos, hasta otras noches más gratas recordaras, y entre el constante ir y venir de los recuerdos te va empujando la marea por dónde vas. A donde iras para escaparte de ti misma que blanca arena sanara tu corazón, yo solo se oscuridades, de llovizna, luego después de todo siempre brilla el sol. Así es amar querida mía, sin esperanza, por eso el alma solo se entrega una vez, después la vida nos traiciona la confianza y uno no vuelve a ser aquello que un día fue. Y fluya el dulce melodioso de tu llanto, suspiro y viento que agitan al corazón, porque llorando se remiendan los quebrantos y la sal cura las heridas que ha sufrido la ilusión. Por eso el mar es el refugio de los tristes por eso el cielo azul no cabe en mi canción, esta canción que solo quiere ser llovizna que se derrama venturosa, refrescando tu dolor. Recordaras otras estrellas, otros cielos hasta otras noches más gratas recordaras y entre el constante ir y venir de los recuerdos te va empujando la marea por dónde vas.nA donde iras para escaparte de ti misma que blanca arena sanara tu corazón yo solo seoscuridades, de lloviznas, luego después de todo siempre brilla el sol.
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